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Ediciones Oriente y Mediterraneo

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Savio
Irene Savio
[Atenas · May 2012]
GRECIA  reportaje 

Grecia, ante la incertidumbre


Votación en GreciaLa elecciones del 6 de mayo en Grecia han castigado duramente a los partidos tradicionales y han dado un enorme impulso a la izquierda, que ahora intenta formar gobierno, aunque también han catapultado al Parlamento al partido ultranacionalista Amanecer Dorado.

El caos político inquieta las bolsas y hace temblar los gobiernos. Sin embargo, el griego de la calle no lo ve así. Harto, deprimido y resignado, el común mortal heleno cree que su voto en las legislativas del domingo es un claro y puntual mensaje a su "corrupta" clase política y un más aún transparente aviso a la "injusta" Unión Europea (UE), al Fondo Monetario Internacional (FMI), a la canciller alemana Angela Merkel.

En suma, el camino a las urnas se ha convertido en una marcha de protesta contra las medidas de austeridad que los organismos europeos s le impusieron a Grecia a cambio de dos préstamos para enjugar la enorme deuda pública del país. Préstamos asociados a medidas de recorte drásticas, que muchos tampoco consideran nada útiles para la recuperación de Grecia.

Este contexto explica el marasmo político en el que está sumida Grecia tras las elecciones legislativas, que el pasado lunes ya se cobró una víctima en carne y hueso: Antonis Samaras, el líder de la conservadora Nueva Democracia (ND), el partido que más votos obtuvo pero que no la mayoría absoluta. Pero la fragmentación del Parlamento también hace peligrar la formación de un nuevo gobierno por parte de Alexis Tsipras, líder de la Coalición de la Izquierda Radical (Syriza), y quien recibió el martes el encargo de alcanzar esa mayoría de 151 parlamentarios (la mitad más uno de los 300 escaños) que son necesarios para sacar adelante una ley en el Parlamento heleno. Una misión casi imposible.

Resultado de las elecciones griegasHa quedado evidente la hecatombe de los dos partidos que gobernaron Grecia en las últimas cuatro décadas, es decir desde la caída de la Junta militar en 1974 —el centroderechista Nueva Democracia (ND) y el Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK)— y que, por extensión, alimentó las filas de todos los demás partidos que entraron en el Parlamento: la jornada electoral del domingo terminó dejando a la política griega patas arriba.

El ND cayó del 33,5 de 2009 el 18,9 por ciento de los votos, el PASOK del 43,9 al 13,2. Por el contrario, el Partido Comunista de Grecia (KKE) subió un punto para situarse en el 8.5, la Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA) se convirtió en la segunda fuerza del país con un 16,8; el ultranacionalista y radical Amanecer Dorado subió de la invisibilidad al 7 por ciento, mientras que Izquierda Democrática y el nacionalista Griegos Independientes, que no existían en las anteriores elecciones, lograron respectivamente el 6,1 y el 10,6. Total: siete partidos que van desde los nacionalistas a los izquierdas estalinistas, pasando por los socialistas, los conservadores y los de tendencias xenófobas.

El resultado: una fragmentación del Parlamento tan difícil que Samaras ya ha tirado la toalla. “Hicimos todo lo que pudimos. Era imposible (formar un gobierno). Devolví el mandato", dijo el político el lunes, tras cuatro horas de reuniones en la sede de su partido en Atenas, en las que verificó que sus adversarios políticos rechazaban una alianza compacta que pudiera gobernar Grecia.

Ahí entró en escena Tsipras, el líder del SYRIZA, cuyo desafío oficial es ahora el de encontrar el equilibrio necesario para formar una coalición que sea lo suficientemente compacta para relanzar la economía de Grecia. Pero se trata de un desafío enorme. Lo dejó claro Samaras el martes. "(Tsipras) quiere formar un frente antieuropeo de izquierda", criticó, insinuando que el político izquierdista ya estaría pensando en unas eventuales nuevas elecciones en junio.

De hecho, Tsipras relanzó de inmediato las propuestas de su campaña electoral. "El veredicto popular claramente invalidó el acuerdo de rescate", afirmó. Y añadió que habría que nacionalizar el sistema bancario griego, asi como crear una comisión para investigar si la deuda de Grecia es legítima.

Campaña electoral en GreciaPero si en tres días Tsipras tampoco consigue formar Gobierno, el mandato le correspondería al tercer partido, los socialistas del PASOK. En caso de que fracasen todos, el jefe de Estado convocaría a los líderes de todos los partidos parlamentarios para una última reunión. La Constitución no fija plazos para este último intento de concertación, que puede durar varios días. Pero si no se logra formar un Gobierno en estos intentos, se abriría la posibilidad de convocar de nuevo a elecciones para el próximo mes, hundiendo al país, y a Europa, en una profunda incertidumbre.

Y no está claro qué ocurriría entonces, porque incluso en la jornada electoral, muchos griegos no tenían claro cuál sería la solución. "Yo no sabía qué hacer. Era muy difícil elegir porque todos nos mienten. Así que voté en blanco", dijo Kikos, un estudiante y camarero de 22 años que acudió al barrio de Ambelokipi para ejercer su derecho al voto.

"La situación es desesperante. Aumentan los desocupados, los pobres, los sin techo, los niños abandonados. La verdad es que es muy difícil saber a quién elegir", coincidió Evi Chriton, una estudiante de 27 años.

"Voté a los comunistas del KKE, pero estas elecciones no me han convencido nada. Lo que queremos es que se negocien mejores condiciones para Grecia ante la UE porque el país se está hundiendo socialmente", dijo Georgios, un publicitario de 38 años, mientras salía de una alborotada mesa electoral en la que había una cola larguísima de personas esperando.

Pobreza en GreciaDe hecho, a pesar de la castrófica situación económica y social, la abstención apenas superó en un 5 por ciento a la de 2009, cuando votó el 70 por ciento de los electores. Pero, eso sí, hubo mucha rabia. En Imittos, barrio periférico de Atenas, se vivían escenas de sombríos votantes que acudían a las urnas despotricando en contra de sus gobernantes, el gobierno tecnócrata. "La culpa la tienen ellos, los que nos mandaron en los últimos 30 años", dijo un anciano refiriéndose a PASOK y a ND, los dos partidos que hasta ahora se habían alternado el poder.

Todo esto en un país en el que el paro ya ha alcanzado al 21 por ciento de la población (el 50 entre los jóvenes menores de 25 años de edad), se reparten 20.000 comidas gratuitas al día y cada semana aumentan los suicidios de gente desempleada o ciudadanos acechados por la crisis.

La campaña electoral ya había evidenciado las similitudes entre el discurso electoral de Evangelos Venizelos, líder del socialista PASOK, y el de Samaras, de la conservadora ND, dos supuestos archienemigos que, sin embargo, son los únicos que aceptan abiertamente el plan llegado de Bruselas y del FMI para Grecia, una mezcla de préstamos y austeridad.

"Este domingo, se decide si permaneceremos en Europa y en el euro o si mandamos al país por la senda de la bancarrota y de la pobreza", había advertido Venizelos, mientras que Samaras afirmaba de que regresar a la dracma, la moneda griega antes del euro, sería catastrófico. En realidad, no toda la población griega votó en bloque a favor de la salida de la UE o de la moneda común. Según los analistas, la mayoría apenas desea unas mejores condiciones y que se abra una nueva negociación.

2008 El país entra por la primera vez en recesión. 
2009 Se destapan las manipulaciones estadísticas de las cuentas públicas griegas cometidas por el Gobierno del conservador Kostas Karamanlis, con la connivencia de Wall Street, durante años.  Se desploman las bolsas europeas y caen los bonos griegos. Bruselas da su primer aviso a Atenas. 
2010 Bajo el nuevo Gobierno de Giorgios Papandreou, Grecia empieza a tomar las primeras medidas de austeridad, al tiempo que comenzaron las huelgas de los trabajadores.  Los países de la zona euro, junto al FMI, aprueba un primer préstamos de 110.000 millones de euros para el periodo 2010-2012. 
2011 Se aprueban medidas de reducción del gasto público y privatizaciones. Prosiguen las huelgas, en las que a los sindicatos se suman ahora los indignados, autogestionarios y anarquistas. 
En diciembre dimite el primer ministro, Giorgios Papandreou. Asume su cargo el exvicepresidente del Banco Central Europeo, Lucas Papadimos. 
2012 Se aprueba un segundo préstamo a Grecia por 130 mil millones de euros. 
El 6 de mayo se celebran elecciones legislativas anticipadas.

Esta actitud, que deja en un segundo plano la cuestión si estar o no en la Unión Europea, está alimentando fenómenos tan distantes como la solidaridad, la xenofobia y el nacionalismo. El partido Griegos Independientes, por ejemplo, va en esta última dirección. Fundado este año, es fruto de una escisión nacionalista y derechista del ND, dirigida por Panos Kammenos, admirador del ruso Vladimir Putin.

Por otro lado, está el caso de Amanecer Dorado, un partido de tendencias nazis, que quiere deportar a todos los inmigrantes que viven en el país.  Consiguió 6.9 % de los votos y ocupará por primera vez escaños en el Congreso gracias a sus políticas xenófobas y de extrema derecha.

"Los nazis de Amanecer Dorada son unos locos y no sé en qué va a acabar aquéllo. Están creando mucha tensión y división dentro de una sociedad que históricamente ha sido muy heterogénea y que ya vivió una Guerra Civil (1946-49)", asegura Yanis, un taxista que confesó votar por el Partido Comunista de Grecia (KKE).  Amanecer Dorado y los comunistas ortodoxos del KKE comparten su rechazo a las políticas de la Unión Europea, pero ahí se acaba lo que tienen en común: en seis colegios electorales de Atenas unos 30 neonazis han amenazado a militantes de izquierdas.

Los miembros de Amanecer Dorado se reconocen porque llevan las prendas típicas de los cuerpos paramilitares: van de negro y con borceguíes. Su partido es abiertamente xenófobo y su símbolo se asemeja a la cruz gamada de los nazis alemanes. Parecía inimaginable, pero ahora dispone de 21 diputados, un resultado insólito para un partido que hasta hace poco era insignificante en este país (en 2009 obtuvo el 0,3 por ciento) y que nunca antes ha sido alcanzado por otros grupos neonazis europeos desde la Segunda Guerra Mundial.

 

El 'führer' de Amanecer Dorado

Nikolaos Michaloliakos, el exoficial del Ejército griego que puso ya en los años 80 los cimientos de los que nació en 1993 Amanecer Dorado (Chrysi Avgi, en griego), tiene 55 años. Su currículum incluye arrestos por posesión ilegal de armas y explosivos en los años 70 y 80. Festejó el domingo su la victoria saludando a las "camisas negras" de su partido y "a los miles de griegos que votaron a favor del movimiento nacionalista Amanecer Dorado" . A la vez se manifestó en contra contra la "tiranía" de la prensa, la "junta" integrada por los partidos tradicionales, los inmigrantes, la pornografía y también el memorándum de austeridad que "viola la soberanía" de Grecia y que ha sido impuesto por la Unión Europea  y el Fondo Monetario Internacional.

"La lucha continuará, y será todavía más fuerte, dentro y fuera del Parlamento. Ha llegado la hora del miedo para los traidores de la patria", sintetizó en una agitada conferencia celebrada en el centro de Atenas, tras la cual algunos de sus seguidores organizaron una marcha callejera en la que no faltaron los saludos fascistas y los proclamas xenófobos.

El político confirmó así las ideas que había difundido durante su campaña electoral y que también figuran en los estatutos y el programa de gobierno de su partido, según el cual Amanecer Dorado es una formación nacionalista, anticomunista, contraria a las políticas neoliberalistas que afectan a Grecia y de la cual pueden ser parte "sólo los arios de sangre y los descendientes de los griegos".

Además de la revisión de todos los acuerdos de Grecia con la Unión Europea, el proyecto político de Michaloliakos respalda medidas como la explotación de todos los yacimientos petroleros y gasíferos griegos, la "deportación" de los inmigrantes ilegales, la erradicación de la corrupción, la nacionalización todos los bancos y la instauración de una comisión para hallar los responsables del "despilfarro" del Estado heleno.

Sobre las relaciones internacionales, en cambio, piden "la liberación de los territorios ocupados de Chipre" por Turquía, la clausura del consulado griego en Ankara como forma de protesta por las disputas entre estos dos países en el Mar Egeo y en Tracia. Además aboga por el potenciamiento de las fuerzas armadas griegas y la abolición de la objeción de conciencia como alternativa al servicio militar obligatorio en el país heleno, lo cual inquieta cada vez más a las organizaciones que se ocupan de la protección de los derechos humanos. 

La misma inquietud la comparte la prensa helena, que califica Michaloliakos de "führer" griego, ya que el credo de su partido se basa en el centralismo del líder, con un poder absoluto sobre sus seguidores.